Pareja y el hijo lograron que su vecina, que tiene un 35 % de discapacidad intelectual, les proporcionara la cartilla bancaria y el número de su tarjeta de débito
La Audiencia Provincial de Cantabria ha condenado hoy a dos años de prisión a una pareja y a su hijo por gastar cerca de 30.000 euros procedentes de la cuenta bancaria de su vecina con discapacidad intelectual. Los acusados han reconocido los hechos ante la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cantabria y han formalizado el escrito de calificación de la fiscalía con el que la defensa había mostrado su conformidad.
Los tres han sido condenados como autores de un delito continuado de estafa con la concurrencia de la circunstancia atenuante muy cualificada de reparación del daño, ya que han entregado a la víctima parte del dinero gastado. Además de la pena de prisión, deberán indemnizar conjunta y solidariamente a la mujer en 11.047 euros. Según el relato hechos que se ha llevado a sentencia, la pareja y el hijo, “puestos previamente de acuerdo y con ánimo de enriquecimiento ilícito, lograron que su vecina, que tiene un 35 % de discapacidad intelectual, les proporcionara la cartilla bancaria y el número de su tarjeta de débito”. Así las cosas, entre noviembre y diciembre de 2022 “realizaron más de cuarenta extracciones de dinero en diversos cajeros automáticos de Cantabria, en muchas ocasiones de mil euros cada una, así como diversas compras online y en tiendas físicas”.
Llegaron a gastar alrededor de 30.000 euros y dejaron la cuenta “prácticamente a cero”, por lo que la mujer tuvo que “ser ayudada por los servicios sociales para subsistir”. Los acusados han colaborado con la investigación entregando todos los objetos adquiridos ilegalmente y han consignado a favor de la víctima un total de 5.400 euros. Además, en la vivienda del hijo de la pareja se encontraron 10.053 euros, que han sido entregados a la víctima.