Con el traslado de los Servicios Sociales a la antigua biblioteca de La Vidriera arrancan en Camargo las obras que van a dotar de accesibilidad a la Casa Altamira, el último de los edificios municipales no accesible. El edificio de tres plantas, conocido popularmente por la” Casa Azul”, actual sede de los servicios sociales y ubicado junto al Parque Lorenzo Cagigas fue construido en 1930 y albergó durante décadas el Colegio Altamira, antes de su traslado al barrio Bardalón de Revilla.
Las obras de instalación de ascensor se desarrollarán durante cuatro meses de los cuales, al menos el primero de ellos, obligará a trasladar a La Vidriera a la totalidad de los trabajadores municipales de Servicios Sociales que prestan servicio habitualmente en este espacio. Los trabajos a desarrollar se han adjudicado a la empresa Llorente Electricidad, mediante procedimiento abierto simplificado, por un importe de 126.999,99 € y comprende dos operaciones. De un lado, todas las actuaciones necesarias para la instalación del ascensor, y de otro, las contempladas para la sustitución del núcleo vertical de las actuales escaleras.
Los trabajadores de Servicios Sociales prestarán servicio desde mañana en las instalaciones de la antigua biblioteca de La Vidriera, en horario de atención al público de 9 a 14 horas. Los usuarios podrán acceder a las instalaciones temporales por la puerta de acceso a las instalaciones deportivas de La Vidriera. El alcalde de Camargo ha agradecido el compromiso de los trabajadores de Servicios Sociales con la mejora de las instalaciones que van a permitir, ha señalado “un servicio aún mejor en una instalación que es una referencia de solidaridad y apoyo vecinal y profesional en Camargo”.