Los temas recurrentes siguen siendo problemas con las compañías de telefonía, compras, seguros, viajes, vuelos, servicios financieros y compraventa de vivienda. La Oficina Municipal del Consumidor de Astillero cierra el primer semestre del año con un notable incremento de las reclamaciones sobre facturas de luz y gas, así como sobre estafas bancarias. La confusión generada en los últimos meses con el incremento del precios y la inestabilidad energética han sido las principales causas del aumento del flujo de demandas de este tipo en la oficina municipal.
Durante los seis primeros meses de 2022 se ha atendido una media de entre 5 y 6 personas al día, tanto de forma presencial como telemática. Incluso, algunas reclamaciones se han tramitado íntegramente por correo electrónico, en caso de preferencia del usuario.
Los temas recurrentes siguen siendo problemas con las compañías de telefonía, compras, seguros, viajes, vuelos, servicios financieros y compraventa de vivienda, aunque las reclamaciones sobre las facturas de la luz y gas o las estafas bancarias han crecido exponencialmente respecto al pasado año.
Las faltas de lecturas por parte de la distribuidora, facturas con importe muy elevado, servicios de mantenimiento son solo algunos de los problemas a los que se enfrentan los consumidores de Astillero. “Es un tema que genera muchas dudas y confusiones. Quién es el distribuidor, quién es el comercializador y ante quién tengo que poner la denuncia en función del problema”, ha asegurado Ana España, responsable de la OMIC de Astillero.
“También se ha generado confusión en el consumidor, tanto en luz como en gas, ya que no sabe si está en el mercado regulado o en el mercado libre”, ha señalado. “El consejo que damos desde la OMIC es que si quieren contratar con una comercializadora llame el mismo usuario para contratar, y no contraten cuando reciban una llamada de una empresa haciéndoles una oferta, porque puede resultar que no sea la empresa que dice ser”, ha puntualizado.
Asimismo, las estafas bancarias han sido otro de los asuntos candentes en esta primera mitad de año, “no tanto en cantidad de denuncias sino en importes muy elevados”, ha reconocido la responsable de la OMIC. “Son muchas las posibilidades de este tipo de estafas pero hay dos tipologías que hemos visto en la OMIC con el mismo modus operandi, a través de enlaces fraudulentos recibidos por whatsapp”, ha añadido, ante lo que recomienda no acceder a ningún enlace sospechoso que se reciba ni por correo electrónico ni por el teléfono móvil.