El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y el vicepresidente, Pablo Zuloaga, han asistido esta mañana a la salida de la prueba de bicicleta de montaña de ‘Los 10.000 del Soplao’, la más numerosa de cuantas se celebran en España en esta modalidad, en la que han tomado parte cerca de 4.000 corredores.
En su intervención en la línea de salida en Cabezón de la Sal, Revilla y Zuloaga han deseado suerte a los participantes y han felicitado la recuperación, tras dos años de suspensión por la pandemia, de uno de los acontecimientos deportivos de referencia en Cantabria y también de los más multitudinarios de todo el país, en el que este año se espera la participación, entre todas las disciplinas, de alrededor de 8.500 deportistas, tanto españoles como extranjeros.
El presidente y el vicepresidente han agradecido el esfuerzo de la organización por sacar adelante una nueva edición del conocido como ‘Infierno cántabro’ y han comprometido el apoyo del Gobierno a este proyecto que no ha parado de crecer desde sus inicios en 2007 y que, además de situar a la región en el mapa de las pruebas de fondo y ultrafondo de España, se ha convertido un activo de primer nivel para la promoción turística de Cantabria.
Miguel Ángel Revilla y Pablo Zuloaga han estado acompañado en la salida por el alcalde de Cabezón de la Sal, Víctor Reinoso; otros concejales de la Corporación local, el director general de Deporte, Mario Iglesias, y el responsable de la prueba, Jesús Maestegui, en representación de la organización.
Tres fines de semanas, once modalidades
El programa comenzó ayer, viernes, con diferentes actividades, exhibiciones y sorteos en la tradicional recogida de dorsales en el parque municipal Conde de San Diego en Cabezón de la Sal. En la jornada de hoy se ha disputado la prueba de bicicleta de montaña, las más popular de todas las pruebas, mientras que las modalidades de ultramaratón, maratón, combinada, marcha a pie, natación en aguas abiertas, soplaoman y adaptada tendrán lugar los días 17 y 18 de junio.
La principal novedad de este año es el cambio de escenario en la especialidad de aguas abiertas y soplaoman, que se completará con los 10 kilómetros de travesía con salida en la playa de Merón, en San Vicente de la Barquera, y llegada en la localidad de Comillas.
Además, se incorpora el parapente de precisión como nueva disciplina que combina la adrenalina con la habilidad en el control aéreo. El punto de salida será la ladera de El Cueto, en el municipio de Mazcuerras, desde donde los participantes deben planear hasta posar sus pies en una diana de 20 centímetros de diámetro, salvando un desnivel de 350 metros.