El Palacio de Festivales de Cantabria ha programado la semana que viene cuatro citas con el teatro, la danza y la música que vendrán de la mano de un nuevo ‘Miércoles íntimo’, la doble función de Mayumana, la primera propuesta del ciclo para niños y un recital. En concreto, El Tejo Producciones llevará el miércoles a la sala Pereda su representación teatral de ‘La casa de Bernarda Alba’, con Pilar García, Belén Galarza, Eva Barón, Lydia Casares, María Valadés, Alicia Liaño, María Olea y Asun Hoyuela.
Para el jueves y viernes se han programado sendas funciones del espectáculo de música y danza de Mayumana, ‘Currents’, mientras que el sábado tendrá lugar la primera de las citas del ciclo ‘El Palacio con los niños’, que vendrá de la mano de ‘Alicia’ y Teloncillo Teatro. También el sábado, pero en la sala Argenta el cantante cántabro Nando Agüeros ofrecerá un concierto dentro su gira ‘Somos tierra’.
Miércoles 2 de marzo. Sala Pereda. 19:30 h. | Miércoles íntimos – Teatro
El Tejo Producciones
‘La casa de Bernarda Alba’, de Federico García Lorca
Anabel Díez, dirección
Con Pilar García Solar, Belén Galarza, Eva Barón, Lydia Casares, María Valadés, Alicia Liaño, María Olea y Asun Hoyuela
Colaboraciones vídeo: Luz González, Pilar Saiz, Susana Díaz Pousada, Julia Fernández Garrido, Jimena Fernández Ramos y Valeria Ruiz Peña
Becarias: María Tezanos y Angy Quin
Maquillaje y peluquería: Isabel Barrera
Fotografía y diseño gráfico: Álvaro Postigo Armendáriz
Iluminación: Víctor Lorenzo
Sonido y música original: Arthur Webber
Director de fotografía, montaje y foto portada: Fran Rodríguez
Ayudante de producción: Verónica Cobo
Duración: 80 min. Sin descanso
Ocho mujeres encerradas en un pequeño mundo, condenadas por diferentes motivos. Unas por ser viudas, otras por ser hijas, otras por estar locas, pero en el fondo, todas por ser mujer.
Una obra simbólica de Federico García Lorca que representa lo que suponía vivir en esa sociedad opresiva para la mujer y que hoy casi cien años después sigue tan vigente como el primer día.
Cuando Bernarda Alba se queda viuda de su segundo marido, lo primero que hace es encerrar a sus hijas. El hombre de la casa ha muerto y todas deben demostrar su pena. Pero una de ellas, Angustias, no es hija de él y además es la heredera universal de su primer marido, por lo que tiene dote, puede casarse y va a tener la capacidad de salir fuera. Esa situación provoca envidias, recelos y enfrentamientos entre las hermanas, pero sobre todo provoca la entrada en ese mundo femenino de un pretendiente masculino que se convierte en un fantasma que recorre toda la obra, ya que solo a través de él, del hombre, la mujer puede ser libre.
Ese hombre que acecha es Pepe, el Romano, y será quien trastoque todo ese mundo inamovible y establecido donde nunca pasa nada, hasta conseguir que todo desemboque en una tragedia.