Los centros de salud del Servicio Cántabro de Salud (SCS) priorizarán temporalmente, hasta el 31 de enero inclusive, la atención urgente y no demorable en las agendas de médicos y pediatras.
La previsión que baraja el SCS de inicio es que el bloqueo de agendas para dar prioridad a lo urgente se mantenga hasta el día 31, pero si la situación de sobrecarga en los centros mejorara se recuperaría toda la actividad.
Esta medida se debe a la elevada carga de trabajo que están soportando los centros de atención primaria, con una sexta ola que sigue creciendo exponencialmente, unido al número de bajas en el personal sanitario, tanto COVID como no COVID.
La sexta ola y la variante Ómicron, con su elevada contagiosidad, están afectando a los hospitales, que han tenido que impulsar planes de contingencia y ampliar y adaptar espacios, y también a los centros de salud, cuyos profesionales están absorbiendo una importante carga asistencial. Con esta priorización se pretende contribuir a la descongestión en el ámbito hospitalario y de la atención primaria.
Ahora hay en el SCS más de 350 profesionales de baja por COVID, casi 290 de ellos sanitarios, y sobre todo enfermeros y médicos. Si sumamos los profesionales de baja por razones que no tienen que ver con el COVID, son más de 1000.
Esta situación, la sobrecarga del sistema por Ómicron y las bajas en el personal, muchas de ellas por la pandemia, obliga a pedir paciencia a la población y solicitar que limite las consultas a los centros de salud en lo posible, a fin de descongestionar la atención y proporcionar una adecuada asistencia a pacientes con sintomatología aguda y urgente, tanto en coronavirus como en otras patologías.
La Gerencia del SCS agradece a los profesionales el esfuerzo que están realizando en esta pandemia por atender a la población.