Proclamar el arte como vivencia, estímulo y sensación que expande la conciencia y la mente creando el mayor beneficio para la creatividad y la inteligencia emocional del ser humano, eso es ‘Tiempo de Arte. Slow Art Circuit’. A este respecto la alcaldesa de Santander, Gema Igual, ha manifestado en la presentación que «a partir del arte podemos sentir otras muchas cosas porque Santander es una de experiencias» y ha añadido que «este proyecto pone en valor los recursos culturales que tiene la ciudad y relaciona la cultura con otros pilares económicos fundamentales de nuestra región».
La ciudad de Santander se convertirá por unos días durante la primavera de 2022 en la capital del Slow Art con un Congreso y actividades paralelas que girarán en torno al arte como transformador social y benefactor.
La presentación ha contado entre otras autoridades, con la presencia de la alcaldesa de Santander, Gema Igual y la directora general de Turismo del Gobierno de Cantabria, Marta Barca, así como miembros de la sociedad civil como Jesús Sánchez o Beda Herrezuelo, y el Director General de la Cámara de Comercio de Cantabria, Jesús Tortosa, asñi como la directora del proyecto Merche Zubiaga. Santander abrirá la puerta al proyecto en Madrid y Málaga.
En el Congreso “Tiempo de Arte. Slow Art Circuit” se debatirán nuevas maneras de concebir y experimentar el arte por artistas, galeristas, coleccionistas, directores de museos nacionales e internacionales. Asimismo, se expondrán estudios científicos que avalan el carácter beneficioso del arte y la cultura sobre la salud.El propósito del Congreso ‘Tiempo de Arte. Slow Art Circuit’ es poner en valor el arte “a través de un consumo saludable como una de las herramientas más poderosas para la transformación social”, en palabras de su directora, Merche Zubiaga.
Zubiaga se ha basado en la experiencia del movimiento Slow Food, creación de Carlo Petrini, así como en las acciones del instaurador de este movimiento en el mundo del arte, Phil Terry, que concibió la idea en el Jewish Museum de Nueva York, en 2008. Un año más tarde 16 museos instauraron el Slow Art Day. Desde entonces, más de 700 lugares, incluyendo museos, galerías, estudios de artistas y lugares de arte público, han participado en lo que se ha convertido en un evento anual.