El diputado nacional del PRC, José María Mazón, ha valorado hoy la consignación de 73 millones de euros en los presupuestos generales del Estado de 2022 para las obras del AVE entre Palencia y Reinosa, una cantidad que hace que las cuentas estén “bien” para Cantabria y que su partido no se sienta “defraudado”, pero ha condicionado su apoyo al proyecto de ley en el Congreso al cumplimiento de los compromisos asumidos y consignados por el Gobierno para este año, y concretamente a la licitación del tramo Renedo-Guarnizo de la duplicación de vía hasta Santander y del estudio informativo de la carretera entre Potes y Vega de Liébana.
“No sólo nos vale lo que está en el papel, queremos ver realidades y estamos en octubre, por lo que vamos a ser exigentes”, ha advertido Mazón esta mañana en una rueda de prensa en la que ha comparecido junto a la secretaria de Organización, Paula Fernández; el portavoz parlamentario, Pedro Hernando, y el senador autonómico, José Miguel Fernández Viadero.
Tras constatar y confirmar en contacto con la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo, que la inversión prevista el año que viene en la línea ferroviaria entre Cantabria y Palencia no se limita a la partida nominativa de 7,8 millones que figura en las cuentas de ADIF, sino que incluye además otros 65 millones recogidos en un concepto nuevo porque serán financiados con cargo a los fondos europeos, el parlamentario del PRC ha considerado subsanada la “primera carencia” que había detectado en el documento.
De hecho, ha valorado que con esa partida el proyecto ferroviario “va razonablemente bien”, pese a los retrasos provocados por la pandemia, y ha confiado en subsanar en el trámite de enmiendas otras “carencias importantes” del presupuesto, como la ausencia de inversiones para el soterramiento de las vías de Torrelavega. De ahí que su principal exigencia para aprobar las cuentas sea la licitación de las dos obras pendientes y consignadas para este año.
“Vamos a ser muy exigentes, porque si no el presupuesto se convierte en papel mojado”, ha insistido a lo largo de su intervención. “Queremos que se cumpla todo lo que firmamos, lo que se aprobó en el Congreso y lo que forma parte del pacto de Gobierno con el PSOE en Cantabria”, ha recalcado.
En este sentido, ha hecho especial hincapié en la necesidad de agilizar el tramo ferroviario Renedo-Guarnizo, una vez concluida la conexión Muriedas-Guarnizo y con Santander-Muriedas a punto de terminar, para completar una parte “fundamental” de la red de cercanías, con una inversión superior a los 50 millones de euros, que revertirá “íntegramente en Cantabria”.
Soterramiento
Además de la licitación de ese proyecto y el estudio de la carretera Potes-Vega de Liébana antes de que finalice 2021, el PRC reclamará en el trámite de enmiendas consignación para las obras de soterramiento en la capital del Besaya, acorde al convenio firmado hace apenas 8 meses entre las tres administraciones implicadas (Gobierno central, regional y ayuntamiento), que cuantifica la aportación del Estado para 2022 en 1,6 millones de euros.
En este sentido, Mazón ha rechazado que la Administración central intente culpar al Ayuntamiento de la falta de presupuesto y ha aclarado que el proyecto para complementar la obra con un aparcamiento está planteado desde 2019, por lo que ha reivindicado “una partida para adelantar la programación”.
Además, ha señalado que esta obra no es sólo “cuestión de dinero”, sino también de “voluntad política” para cumplir los acuerdos firmados y los plazos comprometidos. El diputado nacional del PRC también incluirá en las enmiendas que presentará en el Congreso de los Diputados otras obras que no figuran en el proyecto, como el paso a nivel de Gibaja y la puesta en marcha de la carretera entre Potes y Vega de Liébana.
Por su parte, la secretaria de Organización ha destacado la importante labor que su partido está desarrollando en el Congreso y en el Senado y ha asegurado que su presencia en las instituciones nacionales es “una carta” que permite a Cantabria “jugar en el mus territorial que son cada año los ejercicios presupuestarios” para ir acabando con “el déficit histórico de inversiones”.