«Hay que dotarla convenientemente tanto económicamente, como de medios técnicos y de personal, y llevarla a las áreas de salud interconectándola con la Atención Primaria y la Hospitalaria, lo que mejorará las capacidades de vigilancia y de intervención…»
Juan Gestal Otero es médico y catedrático emérito de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Santiago de Compostela pero, además, es escritor y ha publicado un nuevo texto titulado “Pandemias: las epidemias que asolaron la humanidad” en el que analiza la situación actual del Covid-19 haciendo reflexiones tan interesantes como que “hay que modernizar los ojos del sistema”, o que “la evolución de esta pandemia dibuja un futuro incierto y amenazador”. En esta entrevista explica el contenido de un libro que se dirige a todos los profesionales sanitarios y ofrece una lectura fácil y muchas anécdotas que entretienen a los lectores además de formarles en la historia de las epidemias mundiales.
¿Cuál es tu trayectoria en el terreno de las pandemias? Las enfermedades transmisibles han sido un tema que me ha interesado desde siempre y al que le he prestado mucha atención en mis actividades docentes y profesionales. Mi discurso de ingreso en la Real Academia de Medicina de Galicia en 1995 fue sobre las Enfermedades Infecciosas Emergentes, y tengo documentación sobre la epidemiología y prevención de muchas epidemias que viví o seguí (cólera, enfermedad meningocócica, SIDA, enfermedad de los legionarios, “vacas locas”, “enfermedad de las hamburguesas”, SARS, gripe A, ébola,… ) de las que hablaba en clase a poco de presentarse y sobre las que di muchas conferencias. Hasta el punto de que cuando se producía algún brote infeccioso siempre me llamaban los medios de comunicación para pedirme información.
¿Cómo surgió la idea de hacer el libro? Fue al principio de la pandemia, por el mes de marzo de 2020, hablando con el editor de Bolanda, Antonio Couto, y tras cientos de horas de trabajo a lo largo de más de un año cerré el libro con quince capítulos y casi 600 páginas en las que, tras un capítulo introductorio sobre las epidemias y pandemias en la literatura y el cine, se estudian todas las pandemias y epidemias importantes que se han producido a lo largo de la historia de la humanidad (peste, viruela, cólera, gripe, polio, enfermedades infecciosas emergentes, sida, enfermedad de las vacas locas, SARS, MERS, ébola y arbovirosis emergentes y reemergentes) y por supuesto la COVID-19, finalizando con un capítulo sobre el desafío de las pandemias en la era global, en el que reflexionamos sobre cómo debemos prepararnos para hacer frente a futuras pandemias.
¿A qué público se dirige Pandemias: las epidemias que asolaron la humanidad? Es un libro de casi seiscientas páginas que confío sea útil a cualquier persona con curiosidad sobre el tema, especialmente para profesionales de las ciencias de la salud (médicos, farmacéuticos, veterinarios, enfermeros,… ) pero también para otras personas curiosas, interesadas en conocer y ahondar en el tema. He procurado utilizar un lenguaje claro y comprensible y una extensión que permita a cada lector encontrar lo que busque, lo mucho y lo poco. Contiene muchas anécdotas y curiosidades que espero hagan amena su lectura, incluso se descubre en sus páginas quien fue Jack el destripador. La editorial ha hecho un magnífico trabajo con una presentación que invita y hace muy cómoda y agradable su lectura.
¿Hay muchas diferencias entre esta pandemia y otras del pasado? No, hay más bien muchas similitudes. Las medidas de prevención no farmacológicas utilizadas en esta pandemia no son nada nuevo, son, con los perfeccionamientos correspondientes, las mismas que se han venido utilizando desde hace cientos de años frente a otras pandemias. También se han cometido los mismos errores de siempre: por salvar la economía se ha dañado la salud y al final también se ha acabado dañando mucho la economía.
¿Qué puede aportar a los médicos su nuevo texto? Confío en que además de hacerles pasar unos momentos agradables con las historias y anécdotas que se cuentan, les aporte conocimientos sobre la historia de las epidemias, sobre epidemiología y prevención, y sobre los avances en la lucha contra las enfermedades transmisibles que se han ido produciendo a lo largo de la historia.
Después de escribir el libro y de haber investigado las pandemias ¿cuál cree que es el futuro de la actual? Esta pandemia, después de año y medio largo, no deja de sorprendernos. Sobre todo esta inesperada quinta ola en la que adquirieron el protagonismo los jóvenes, que hasta el momento apenas habían intervenido en la transmisión, así como las gestantes, no especialmente afectadas hasta ahora, y los menores de 11 años, que apuntan ya como los próximos protagonistas, ocupando ahora el cuarto lugar en incidencia acumulada a 14 días, lo que nos hace temer un regreso a la aulas y un otoño muy complicado. Otras características novedosas como la importante reinfección de vacunados, la mayoría con cuadros asintomáticos o leves pero con cargas virales muy elevadas que les convierten en transmisores dificultando adquirir la inmunidad de grupo, junto con la circulación predominante de la variante delta; la posible necesidad de una dosis de refuerzo, y la amenaza de nuevas variantes más peligrosas, que escapen de la inmunidad o sean más letales, dibujan un futuro incierto y amenazador.
Y ¿cree que habrá otras? Sin duda ninguna y conviene prepararnos para poder hacerles frente en mejores condiciones que a esta. Hay que modernizar la Vigilancia epidemiológica, los ojos del sistema, que nos permita ver con antelación y claridad los problemas, para prepararnos y hacerles frente con ventaja. La Salud Pública tiene que dejar de ser la cenicienta del SNS (Servicio Nacional de Salud). Hay que dotarla convenientemente tanto económicamente, como de medios técnicos y de personal, y llevarla a las áreas de salud interconectándola con la Atención Primaria y la Hospitalaria, lo que mejorará las capacidades de vigilancia y de intervención.
Para terminar ¿en qué medida cree que las pandemias cambiarán el curso de la historia y de la sociedad? Las pandemias, como otras grandes crisis ocurridas a lo largo de la historia han supuesto, además de sufrimiento y muerte, progreso para la humanidad. Por ejemplo en las pandemias de cólera del siglo XIX se inició el desarrollo del método epidemiológico con John Snow; de la estadística sanitaria con William Farr; se aprobaron las primeras leyes sanitarias, en España la Ley Orgánica de Sanidad en 1855; se celebraron las primeras Conferencias Sanitarias Internacionales, creándose en la de 1903 la Oficina Internacional de Sanidad e Higiene Pública, antecedente de la OMS, y se desarrolló la primera vacuna moderna, una vacuna atenuada frente al cólera por Jaime Ferrán. En la epidemia de peste neumónica de Manchuria de 1910-1911 se diseñó una mascarilla antecedente de las FFP2. En la pandemia de polio de Copenhague de 1952 se pusieron en marcha las primeras Unidades de Cuidados Intensivos, y en la actual se desarrollaron y utilizaron las vacunas de ARNm que van a revolucionar el mundo de la vacunación. Pero una pandemia como la actual, de estas que decimos que ocurren una vez cada cien años, ponen al mundo patas arriba, y nos hacen ver que a pesar de los enormes avances conseguidos seguimos siendo muy frágiles e indefensos frente a las infecciones.
Fuente: Colegio de Médicos de Cantabria.