El consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, ha visitado las nuevas instalaciones de la fábrica de hielo del puerto de Santoña, que ha incrementado su capacidad de producción tras la ejecución de un proyecto de ampliación que ha contado con el apoyo económico del Gobierno de Cantabria.
En total, el Ejecutivo ha aportado 186.000 de los 401.000 euros que ha costado la iniciativa, impulsada desde la Cofradía de Pescadores de Santoña, y que va a mejorar el equipamiento del puerto pesquero y las condiciones de tratamiento y almacenaje de los productos de pesca.
La inversión ha permitido la instalación de un nuevo silo para fabricar hielo y dos generadores en escamas para los compradores, con una producción diaria de 20 toneladas. Asimismo, se han instalado nuevos sistemas de pesaje y un dispensador automático.
Jesús Oria ha reafirmado su compromiso de seguir apoyando al sector pesquero de Cantabria y ha destacado que en esta legislatura su Consejería ha destinado más de 420.000 euros en diversas actuaciones para mejorar la actividad de la Cofradía y del propio puerto de Santoña.
Estas inversiones, ha señalado, permiten modernizar las instalaciones y mejorar el servicio que se presta en nuestros puertos, garantizando así el desembarco de capturas en la región. Concretamente, según ha resaltado, el hielo en escamas mejora notablemente la calidad del pescado fresco que comercializa la lonja de Santoña, que ya supone el 45 por ciento del total.
En esta visita, el consejero ha estado acompañado por la directora general de Pesca y Alimentación, Marta López; el alcalde de Santoña, Sergio Abascal; el patrón mayor de Santoña, Miguel Fernández, y de otros miembros de la junta directiva.
El patrón mayor de la Cofradía ha subrayado la importancia que ha tenido el dragado y el balizamiento de la entrada al puerto pesquero, lo que ha permitido «la entrada de barcos de gran tonelaje» que venden su pescado en esta lonja.
La lonja del puerto de Santoña comercializó en 2018 un total de 13 millones y medio de kilos de pescado por un importe de 20 millones de euros. Se trata de una cifra histórica, que superó los buenos datos de 2017, cuando se subastó pescado por valor superior a los 16 millones de euros.
Para 2019, las responsables de la Cofradía cuentan con una reducción en la cuota de verdel, si bien confían repetir las descargas de los costes de anchoa y bonito.