El Palacio de Festivales de Cantabria ha programado para esta semana dos propuestas, en concreto, una de teatro con la representación de ‘La lucha por la vida’ de Pío Baroja y la otra, de música clásica con la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia. Adaptada por José Ramón Fernández y con la dirección de Ramón Barea, el viernes 17 de mayo llega a la sala Argenta esta producción del Teatro Arriaga, en coproducción con el Teatro Español. Se trata de una adaptación teatral en la que José Ramón Fernández, Premio Nacional de Literatura Dramática, es fiel al autor y leal con la obra, sin imponer su visión y con el fin de que se sienta que está todo. Por su parte, Ramón Barea, Premio Nacional de Teatro y que también participa en la representación, propone una puesta en escena que va a lo esencial, con mucho dinamismo y centrándose en la palabra como activadora de la imaginación.
Viernes 17 de mayo. Sala Argenta. 19:30 h / Teatro : ‘La lucha por la vida’ de Pío Baroja
Adaptación José Ramón Fernández | Dirección Ramón Barea / Con Ramón Barea, Leire Ormazabal, Aitor Fernandino, Olatz Ganboa, Ione Irazabal, Itziar Lazkano, Diego Pérez, Sandra Ortueta, Arnatz Puertas y Alfonso Torregrosa / Diseño de espacio escénico: José Ibarrola
Diseño de iluminación: David Alcorta
Diseño de vestuario: Betitxe Saitua
Diseño de espacio sonoro: Adrián García de los Ojos
Audiovisuales: Ibon Aguirre
Una producción de Teatro Arriaga y Teatro Español / Duración: 165 min. Entreacto incluido
El montaje de ‘La lucha por la vida’ tiene visos brechtianos porque están contenidos en Baroja.
Es un adelantado
Una mezcla de estilos no naturalistas (vodevilescos, zarzueleros, melodramáticos, esperpénticos) sirven de presentación para analizar con la distancia suficiente a los personajes y sus peripecias. Ritmo cinematográfico para una narración teatral nada maniquea, que no nos deja empatizar con el héroe, porque el héroe no es ejemplar ni dueño de su destino, y tiene que tomar decisiones que no siempre son las políticamente correctas. El espectador se coloca en el brete de observar activamente a los personajes.
Tres novelas río para un espectáculo río, habitado por multitud de seres en un trepidante juego de actores, casi fregolismo. Diez intérpretes para casi cien personajes. En la trilogía se quedan no menos que otros tantos para quien quiera conocerlos. No nos cabían en el escenario.
En la novela barojiana caben muchas capas: “la novela, hoy por hoy, es un género multiforme, proteico, es formación, en fermentación; lo abarca todo: el libro filosófico, el libro psicológico, la aventura, la utopía, lo épico; todo absolutamente”. El teatro contemporáneo, un siglo después, se construye con estos mimbres. Vamos allá. “Una de las funciones del teatro desde que el mundo es mundo (Baroja/Brecht) es la de divertir”. Es pues, este espectáculo, un juego barojiano, multiforme, de una compleja sencillez, que se nos enfrenta desde el escenario. Que se diviertan.