Puede visitarse en dos plantas completas de Casyc hasta el 10 de enero
El museo de arte de Santander (MAS) y la Fundación Caja Cantabria han presentado hoy la exposición ‘Simbolismo. Del otoño el destello amarillo y dulce’, que supone la coproducción número 25 de las llevadas a cabo por ambas instituciones desde 2018.
Tras una nueva e intensa selección de casi setenta obras (pinturas, esculturas, fotografía, video creaciones, grabado, artes decorativas) de ambas colecciones, llega esta muestra dirigida por Juan Muñiz y Salvador Carretero, y centrada en el movimiento simbolista de los siglos XIX al XXI, que podrá visitarse en dos plantas completas de Casyc hasta el 10 de enero.
Así lo ha dado a conocer en rueda de prensa la concejala de Cultura, Noemí Méndez; acompañada por Salvador Carretero, director del MAS; Juan Muñiz, director de la Fundación Caja Cantabria; y Fernando Zamanillo, crítico de Arte y patrono de la Fundación Caja Cantabria.
Da título a la muestra uno de los versos de ‘Otoño’, poema que Charles Baudelaire incluyó en ‘Las flores del mal’: ‘Del otoño el destello amarillo y dulce’. Los comisarios, entre los que se encuentra la responsable municipal de Cultura, han querido desarrollar la tesis de un amplio y genérico simbolismo, movimiento en el que Cantabria cuenta con la figura excepcional de Rogelio de Egusquiza.
No obstante, la muestra parte de Francisco de Goya, artista con el que se inicia la modernidad, a través de los ejemplares de la serie de los Caprichos en donde destaca el afamado ‘El Sueño de la razón produce monstruos’ (1799) y continúa con Clara Trueba y Cossío, artista rescatada por el MAS en 1992, de quien se exponen fondos artísticos y musicales.
Como ha recodado Méndez, el Simbolismo en sentido estricto es un movimiento francés, primero literario y filosófico, después transferido a otras facetas creativas, que se fija en la búsqueda del conocimiento intelectivo y la expresión conceptual.
Y, ha apuntado, que es en esos términos como se viene produciendo esta colaboración con el CASYC, y dada la naturaleza transversal del concepto para esta exposición, “no hay mejor título que englobe el apoyo constante en nuestras exposiciones del MAS por parte de esta institución. Un símbolo, que sin duda es señal de apoyo a la ciudad”, ha subrayado.
Los simbolistas han entendido el mundo como un misterio y el arte como un sueño, lo que les relaciona con la revelación freudiana de las leyes de la experiencia psíquica, que tiene como consecuencia la búsqueda de las leyes del arte mismo en el estudio de los objetos producidos por los pueblos primitivos.
Rogelio de Egusquiza protagoniza una buena parte de la exposición. De él, se exponen todos los fondos que obran en poder del MAS y de la Fundación Caja Cantabria, un total de unas 20 obras, entre pinturas y estampas, dado que se trata del artista cántabro que participa de todos los conceptos simbolistas franceses (Moreau, Baudelaire, Puvis de Chavannes, Redon…, con precedentes en Blake, prerrafaelitas, nazarenos…).
Igualmente, se mostrarán además y por vez primera cuatro óleos nuevos incorporados en propiedad al MAS gracias al generoso legado testamentario de Elena Ribalaygua, pinturas que fueron expuestas en 1995 y muy importantes en el catálogo del artista santanderino.
A partir de ahí, los comisarios abren el concepto de par en par, ofertando una nueva transversalidad, ya habitual en el trabajo de ambas instituciones, recordando que asuntos simbólicos ya están presentes desde siempre, también en los siglos XX y XXI.
De ahí que la selección incluya al gran simbolista expresivo que es José Gutiérrez Solana, con varias obras de las dos colecciones. José María Rodríguez, José Villegas, Donato Avendaño, Ramón Casas, Darío de Regoyos, Daniel Alegre, Julio Romero de Torres, María Roesset, Gerardo de Alvear, Pancho Cossío, Evaristo Valle, Santiago Ontañón, Ricardo Bernardo, Antonio Quirós, Joan Miró, Cristino de Vera, Eduardo Soria, Ciuco Gutiérrez, José Luis Mazarío, Emilio González Sainz, Chema Cobo, Bermejo o Luis González Palma, completan una terna especialmente atractiva.
El proyecto estará aliñado por las habituales visitas guiadas para escolares y para adultos, a cargo de Isabel Cotero y Lucía Andérez, jóvenes historiadoras del arte. Asimismo, se confecciona y prepara una serie de encuentros, charlas y diálogos que versarán sobre distintas figuras representados en la exposición.